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Confusión: medios y fines
Muchas veces nos pasa que, al defender las filosofía de la libertad, nos acusan de no tener corazón, de carecer de sensibilidad, de ser un hijo de puta, un garca, de no pensar en los que menos tienen, y un largo etc. A la hora de discutir sobre política y economía te señalan como si fueses un monstruo. Entre algunas de las posiciones que los liberales suelen defender, se encuentra la oposición a que los gobiernos financien o estén a cargo de brindar/garantizar educación, salud, cultura, subsidios, privilegios, prebendas, etc. tampoco creemos que el gobierno deba funcionar como una especie de papá o mamá, diciéndonos si podemos fumar o consumir otras drogas, comer comida chatarra, ponernos casco, etc.
Básicamente todas estas posturas parten de un mismo principio ético aplicado de manera consistente en todos los ámbitos. Consiste en reconocer que uno es dueño de su cuerpo, y nadie mas que uno tiene un derecho sobre su cuerpo, tanto para hacer lo que quiera con él sin agredir a ningún tercero, y a la vez, para relacionarse con cualquier otra persona, una regla simple que garantiza una sociedad pacifica basada en las relaciones voluntarias, y no en la fuerza.
En definitiva, muchas de las personas a la hora de intentar entender la postura que defiende la libertad por sobre todas las cosas, entra en un estado de confusión y lanza acusaciones tales como que «no te importa la educación de los más pobres», que se relega la cultura a un papel secundario y elitista (solo para ricos), que estás a favor que la gente se enferme con cáncer de pulmón, o que la gente se muera en accidentes de moto por no usar casco. La confusión de la que hablo es una entre fines y medios.
Cuando digo que nos oponemos a que los gobiernos ofrezcan todo lo que mencioné más arriba, o se metan en asuntos de la vida privada que no afecten a terceros, lo que se intenta dejar en claro es el desprecio por los medios utilizados, y no por los fines escogidos que la mayoría de las veces coinciden (salvo algunos valores que difieren como sería la igualdad entre los colectivistas, pero en términos prácticos se puede asumir, de buena fe, que todos buscan una elevación en el nivel de vida de la gente ). No deseamos que la gente se muera de cancer de pulmón o que haya obesidad y más infartos por la comida chatarra, tampoco anhelamos que las empresas cierren, el punto a discutir es ¿de que manera logramos esto? Se trata, por lo general, de una discusión de medios, no de fines.
Los medios que optamos para alcanzar los fines son el factor determinante para decidir en que tipo de sociedad se va a vivir, una basada en relaciones voluntarias, y consecuente con la filosofía de la libertad, o una sociedad donde un grupo minoritario de personas tenga el poder para decidir como se va a organizar una comunidad (país/provincia/pueblo), cuanto dinero se va a asignar a cada asunto y que actividades podrán realizar los miembros de esa comunidad, es decir una sociedad que tenga como aspecto característico relaciones basdas en la fuerza y la imposición.
Sobre el aspecto superior en cuanto a la efectividad de optar por los medios acordes a una sociedad libre, los analizamos en varios posts que pueden ver acá (en la parte de economía).
Justo hace varios días que vengo pensando en eso. Me parece que la confusión nace cuando la gente cree que el gobierno esta para «brindar seguridad». Eso abre la puerta a «¿la seguridad de que?», y un estatista completara «la seguridad de la salud, del trabajo, de la felicidad, del bienestar, de la educación… etc». Y esto no es así, los gobiernos fueron concebidos originalmente para «garantizar la libertad», que poco tiene que ver con lo anterior, porque que también debes ser libre de suicidarte, intoxicarte, fundirte y sumergirte en la mas profunda ignorancia sin que nadie te hinche las pelotas, o sea que nadie atente contra todos los tus aspectos de tu propiedad: tu vida, tu libertad y el fruto de tu trabajo. Y a eso si, yo le llamo «seguridad».
Todos somos libres de autoinfligirnos voluntariamente pero también tenemos derecho de que el estado no asista en el caso de que no tengamos capacidad de mantenernos por diversos factores.
Sino sería como la visión espartana, tiremos a los incapacitados y feos por una montaña y que se mueran porque no quiero pagar impuestos para ayudarlos a ellos… que se curtan.
Y ni empecemos a hablar de voluntades, les ruego, el slogan del blog es «no hay que pagar impuestos» no el «generemos un clima de libertad e igualdad para todos»
Si desde el mínimo esfuerzo que es la diatriba web no pueden tener ni la más pizca de compasión humana de que voluntad me hablan?
En cambio el primer párrafo es liberador y pone en evidencia la cola de paja de varios
Abrazo de gol.
Seran discapacitados pero no inutiles, si reciben el estimulo adecuado pueden mantenerse y prosperar sin necesidad de que el Estado intervenga en sus vidas y de eso hay muchos casos.
Es aunque no lo creas, cuestion de voluntad.
Ademas el slogan es «un blog para decir basta» no «no hay que pagar impuestos».
Me da gracia que uses a Esparta como ejemplo, cuando precisamente esparta fue una sociedad colectivista, donde el estado lo era todo, y donde las individualidades de cada uno eran mal vistas.
En cambio Atenas era la ciudad del individualismo y del capitalismo.
Todos sabemos como terminó la historia, mientras que en Atenas florecieron las artes, el conocimiento y el progreso, de la poderosa Esparta apenas quedaron epopeyas y relatos.
Cualquiera cuando decis «que tenemos derecho de que el estado no[s] asista en el caso de que no tengamos capacidad para mantenernos por diversos factores» estas diciendo que una persona que no tiene la capacidad para mantenerse por X factor (discapacidad, vagancia, poca inteligencia, etc.) tiene derecho a exigirle al resto de la sociedad que lo soporte y lo mantenga, y para esto es legítimo usar la violencia estatal.
Tu problema que equiparas la «compasión humana» a la «violencia estatal», cuando son dos palabras opuestas en su significado, justamente desde aca preferimos más compasión humana y menos violencia estatal.
Cualquiera piensa que ponerte un arma en la cabeza para obligarlo a que lo ayudes es «digno», pero pedir la compasión y la solidaridad de los demás pacíficamente es caer muy bajo.
Démosle un arma y que salga a demostrar su dignidad.
El concepto de «Compasion Humana» que todo colectivista (y por lo tanto Cualquiera) tiene, es el de entender a dicha compasion como el vivir de una persona para sus semejantes en vez de para si misma; garantizando esa existencia de sacrificios inutiles mediante la fuerza.
En cambio, yo entiendo como compasion al acto individual voluntario de ayudar a alguien en peores condiciones que yo.
A proposito de esto, encontre una frase que viene como anillo al dedo:
It is easy to be conspicuously «compassionate» if others are being forced to pay the cost. – Murray N. Rothbard
Otra cosa que puede confundir, es la posición de un liberal ante determinadas medidas de los gobiernos, sea cual sea. Porque a veces por criticar la medida, por la cuestión de fondo, pareciera que se está a favor de algo que puede ser injusto, pero en realidad se está en contra de la intervención, de toda intervención económica que distorsione. Pero esto no quita el hecho que actualmente vivamos en una economía que dista muchísimo de una de libre mercado, y donde hay empresas, sean productivas, bancos, de servicios, etc. que claramente han sido y son favorecidas por medidas intervencionistas o protecciones estatales. Argentina es un claro ejemplo de eso. Y de seguro se comparte con alguien de izquierda mucho del diagnostico, como este caso del FMi, como lo fue el salvataje de bancos, acá en 2001, o casos recientes en Estados Unidos y Europa, etc.
Muchos planteos económicos liberales pueden parecer una locura y hasta desalmados. Por ejemplo el tema de salud, claro un planteo de que privado ante situaciones como las que muestra Sicko, de Michel Moore, suena una locura desalmada. Pero el tema es que ahí, que actualmente ya están jugando medidas que favorecen a un grupo pequeño o traba la entrada de nuevos actores. Está para ejemplo del caso argentino en cuanto a las telecomunicaciones- Cómo siendo un país que proporcionalmente está entre los primeros del mundo en penetración de mercado y de uso de servicios, sólo tiene hoy 2 o 3 actores?? Deberían estar matándose las empresas por entrar al mercado y conquistar clientes, y por ende deberíamos tener uno de los servicios de mejor calidad en el mundo. Si las empresas buscan el lucro ¿por qué no vienen? ¿Por qué están perdiendo la oportunidad? La única respuesta lógica es que algo las traba, sino ya estarían.
Che, no es una discusión de medios. Ni cerca está de serlo. El liberalismo libertario que los autores de este blog profesan sostiene como fin el despliegue de la libertad individual. A su entender, la libertad es un principio que no puede ser violado bajo ningún concepto: no hay fin alguno que admita el sacrificio de ninguna porción de libertad.
Otros pensamos distinto: creemos que asegurar una mejor calidad de vida para la mayor cantidad de individuos posible es un bien superior a garantizar la plena libertad formal para todos. Algunos creemos que ciertas coerciones son legítimas si redundan en mejores condiciones de vida para la mayoría. Para enunciarlo en términos simples: si la tierra no alcanza para todos, algunos consideramos que limitar la cantidad de tierra a la que cada uno puede acceder es un curso de acción legítimo. Priorizamos el derecho de quien no tiene nada a alimentarse por sobre el derecho de quien tiene tierra a desplegar su libertad.
Podemos dar la discusión, pero es absolutamente falso que sea una discusión sobre medios, desde el momento en que hay quienes pretenden que la libertad individual sea un principio irrenunciable, o no susceptible de grados o matices.
Nunca te preguntaste porque hay tanta gente en la miseria? No es por carezcan de oportunidades, señor Albin, todos gozan de alguna que otra oportunidad en su vida por minima que esta sea. Sino que porque carecieron de la capacidad y la voluntad necesarias.
Es inmoral, por no decir injusto, que aquel que ha llevado sus facultades al maximo para su progreso personal sea despojado de sus ganancias y propiedades con el fin de mantener a un grupo de personas que no trabajan ni estudian, ni buscan hacerlo.
Todo hombre nace vivo, libre y con propiedad sobre si mismo; ni las circunstancias en las que nace ni las condiciones iniciales de su vida pueden cambiar esto, de el depende la posibilidad de prosperar, estancarse o decaer.
Al Verdi parece un un tipo inteligente y honesto, como se puede ver en lo que comentó abajo. Pero lo que vos hacés -atribuir la miseria a la falta de voluntad- es una hijaputez.
¿Acaso no es inmoral que de dos hombres que nacen iguales uno deba esforzarse muchísimo más que el otro para llegar al mismo resultado?
Y más allá de tu idea despreciable acerca de que los pobres son pobres porque quieren… ¿de dónde sacaste la idea igualmente estúpida que los ricos lo son por sus capacidades? Ok, Steve Jobs, Bill Gates, Mark Zuckerberg… pero ¿Macri? ¿De Mendiguren? ¿Martínez de Hoz? ¿Esos tipos se esforzaron más que un albañil que vive en la villa y labura 12 horas por día para darle de comer a su familia?
Si te la vas a dar de minarquista y no querés ser simplemente un sorete, por lo menos leé a Nozick. Nozick defiende el derecho de disponer del patrimonio como uno quiera («from each as they choose, to each as they are chosen»), pero no se le ocurriría decir que toda diferencia de riqueza responde a una diferencia de mérito. Considera prioritario garantizar la libertad de testar antes que garantizar el derecho a alimentarse. Yo nunca estaría de acuerdo con algo así, pero al menos a Nozick no hay que leerle vómitos de prejuicio clasista disfrazados de teoría.
Creer que el mercado premia el merito es absurdo, hay gente con que se esmera mucho y sin embargo vive en una situación que no nos gustaría vivir.
Creer que la pobreza es 100% culpa de otra persona también es un error, sin embargo hay que admitir que en el contexto en el que vivimos muchas familias están destinada a vivir en la pobreza por la falta de oportunidades no debido a una distribución desigual o inequitativa de ellas (las oportunidades, no pueden distribuirse, se descubren) sino porque muchas de las intervenciones del gobierno generan desincentivos para que mejoren la calidad de vida los que menos tienen por nombrar algunas: el proteccionismo les obliga a consumir productos mas caros, la inflación destruye el valor del poco dinero que poseen, las regulaciones les impide abrir su propio emprendimiento o las estrictas leyes laborales obstaculizan el empleo de mas gente, y por ultimo las altas cargas impositivas, y un poco de todo lo mencionado anteriormente, atentan contra la unica fuente que puede sacarlos de la pobreza, un aumento del capital invertido en el país.
Ahora bien, encausando un poco este asunto, el problema con el «derecho a alimentarse» (y capaz a esto iba el post original) que proclamar ese derecho no es un fin en si mismo, yo no estoy de acuerdo con que exista tal derecho (en el sentido positivo que lo usas vos), sin embargo si queremos que todos o la mayor cantidad de gente se quieran alimentar, como lo hacemos? Proclamando derechos? Con un sistema de planificación centralizada que a la larga termina dejando a todos sin comida? O permitiendo que se den las condiciones adecuadas para que aumente la calidad de vida de los que menos tienen, y además confiando en la buena voluntad de las personas que dicen estar preocupadas por el hambre de las personas y que surgan iniciativas de la sociedad civil, como sucedió antes de la implementación del «estado de bienestar», ,mientras como decía antes se dan las reformas de fondo que permitiran que deje de existir ese «derecho a alimentarse» (y asi pueden inventarse otros derechos como el «derecho a la banda ancha» o «derecho al lcd de 42″»
Por ultimo respecto al comentario de Niko Minarquista, en lo abstracto tiene razón, el problema es analizar si vivimos en una sociedad donde la inciativa individual tiene espacio, o si es pisada por los gobiernos.
Tengo que admitir que ni yo tengo bien claro que quise escribir en este post. Se me mezclaron dos ideas que funcionarían para dos posts diferentes, pero que en uno solo resultó confuso. El problema fue mezclar una defensa utilitarista, y una defensa moral en un mismo post.
En este caso Albin tiene razón, tenemos fines distintos, y podemos discutir acerca nuestras valoraciones morales respecto del uso de la fuerza para una u otra cosa, o si esta no debe ser iniciada jamas, pero afirmar que tenemos los mismos fines es erroneo.
Al Verdi, contesto acá porque no me deja responder a una respuesta. ¿En qué punto tiene razón Niko Minarquista? Para mí está equivocado en cada letra, así que agradeceré la precisión.
Con respecto al derecho a alimentarse, me parece de mala fe compararlo con el derecho a la banda ancha. Desde ya, puede ser mejor un mundo en el que todos tengan banda ancha que uno en el que no. Pero tener o no banda ancha puede ser cuestión de preferencias o prioridades. Por el contrario, nadie elige morir de hambre, vivir a la intemperie o carecer de atención médica.
El sistema de planificación central tendrá todos los defectos que quieras, pero en Cuba no hay muertes por desnutrición (no me molesta conceder que algo habrán aprendido de las hambrunas más o menos gestionadas desde arriba de Mao y Stalin). Y no me cabe duda de que más gente tuvo trabajo, vivienda y comida con el Estado de Bienestar que antes o después de él. Los números no parecen darle la razón a quien cree que basta con confiar en la buena voluntad para garantizar que la mayoría pueda alimentarse. Fue siempre el Estado el que sacó a la gente de la pobreza. Preguntales a los obreros británicos si preferían el Estado subsidiador que tanto te indigna o el Estado thatcherista. Vos podés tener otros motivos para considerar que es mejor que un Estado subsidie o grave menos antes que más. Pero lo que no te compro es que esos motivos tengan que ver con reducir la pobreza.
Una vez más, discutimos fines. Yo creo que es legítimo sacrificar ciertos márgenes de libertad en pos de garantizar condiciones mínimamente dignas de vida para todos. Vos no refutás ese argumento. Simplemente volvés a insistir en la prioridad absoluta de la libertad formal. No demostrás que la plena libertad garantice que más gente vaya a vivir en condiciones dignas, sino que reiterás que la plena libertad te parece más importante.