Aniversario

Careta Piratona

Ya no somos piratas....¡ahora somos reyes!

Primero de Mayo, aniversario de la olvidada Constitución de 1853.

Ya se ha impuesto en la agenda oficial la «necesidad» de reformar la constitución existente. Está bien que es una constitución ya medio mentirosa y populachera, pero republicanísimos de excelencia como Diana Conti quieren la famosa «Cristina Eterna», con ángeles tocando músicas celestiales alrededor y una luz de sabiduría embebiéndola. Y fue esta mismísima Conti la que, recientemente dijo que había que reformar la constitución porque está basada en una «matriz liberal».

¿Qué tipo de constitución quieren si no es una liberal? La constitución es liberal o no es. O está para defender los derechos individuales de las personas ante la arbitrariedad del poder de turno o su existencia es absolutamente irrelevante. ¿Qué quiere que diga la constitución propuesta por Conti? Supongo que algo como «El estado está para manejarlo todo y podrá decidir a voluntad sus facultades, obligaciones y manera de financiamiento. Y cada X tiempo arriará ovejas a meter papeles en una cajita».

Para eso es preferible no tener ninguna constitución. Sería mucho más honesto decir «Acá nosotros tenemos los palos y se hace lo que la familia / facción / clan / banda organizada gobernante quiere. Y no hay ninguna constitución». Por lo menos las cosas estarían mucho más claras, tal cual lo estaban en las antiguas monarquías («El rey tiene los soldados», «el rey está ahí por decisión de Dios», «El rey ES Dios», de acuerdo a la sociedad correspondiente). Pero claro, toda esta gente está ahí para poner un velo de legitimidad en un clarísimo despotismo estatista. Por cierto, personas como Diana Conti y demás progres vomitan al solo pensamiento de las monarquías constitucionales existentes, tildando de retrógrada la existencia de las familias reales (que en realidad están simplemente de adorno).

En fin, como diría el abogado de Núñez Carmona, estaría bueno que «se saquen la careta».

Una cosa positiva que traería el sinceramiento del despotismo, sería el cierre del congreso y echar a las patadas a una cantidad enorme de idiotas útiles que vienen hace rato autosatisfaciéndose y teniendo fantasías eróticas con un estado mágico y maravilloso, aún a pesar de no tener ni un solo resultado exitoso en 70 u 80 años. Así por lo menos sufrirían en carne propia lo que le pasa al ciudadano de a pie, en lugar de estar calentitos en un despacho escribiendo idioteces y fantasías mientras cobran jugosos sueldos. Para déspotas, prefiero buenos déspotas y no una manga de inútiles que se la pasan diciendo que hacen todo «por tu propio bien».